¿Qué es el Liderazgo Ético?
Por: David Humberto Yturrioz Gaspar

La situación mundial en cuanto a la corrupción en el ámbito empresarial y la gestión pública es una manifestación constante en los medios de prensa escrita y audiovisual La desconfianza de la población ante las autoridades ha llevado a que se cree una situación de escepticismo individual y colectivo.
De esta manera, nos enfrentamos a cientos de casos de personajes públicos que están siendo encarcelados y juzgados por la mala toma de decisiones que desvirtúan las normas éticas en todo sentido.
Abordar el tema ético es acercarse a los planteamientos de los antiguos griegos tanto presocráticos y socráticos que se centraron en esta especialidad para dar una forma de hacer docencia y buscar empoderar a hombres honestos en distintas esferas de la sociedad. Fueron los epicuristas que a través del determinismo de la física con el libre albedrio, y libertad de decisión de los hombres y mujeres para honrar sus nombres y apellidos; y ser un modelo ejemplar ante la comunidad de las ciudades de Grecia mucho antes de Jesucristo que marcó también una nueva fase de apoyo a una nueva moral ética y cristiana(1).
La ética fue una de las publicaciones importantes de Aristóteles, discípulo del gran filósofo Platón(2). Sus aportes fueron pioneros en el campo de la moral y la ética, el énfasis de sus ideas era que los políticos debían ser personas connotadas, inteligentes y honorables.
Los temas éticos no solo se han alineado en el aspecto de las actividades políticas o publicas, también a partir del siglo diecinueve y hasta el actual siglo veintiuno el liderazgo ético ha empezado a tener un mayor peso de atención de parte de académicos y profesionales de las gestión de las instituciones privadas y estatales, por eso el grave daño que ocasiona la corrupción al país por el egoísmo de un minúsculo grupo de malos ciudadanos que crean un daño moral mucho mayor que los delincuentes comunes de poca monta. Por eso, es necesario tener en cuenta la definición de lo que es la ética.
Hay diversos autores que han tratado sobre la definición de la ética de una manera pertinente y puntual, de este modo tenemos la siguiente definición de la ética.
(…) La génesis del término “ética” se sitúa en la Grecia antigua. Deriva de la palabra “Ethos”. La ética es el origen de los actos humanos, pero también significa “modo de ser”, “carácter”. La ética configura el modo de ser que va adquiriendo la persona lo largo de su vida(3). Por su parte, el término “moral” procede del latín “mos, moris”, que significa “costumbre”, si bien llegó a significar también carácter o modo de ser. Ética y moral tienen, entonces, un significado muy similar, refiriéndose al modo de ser o al carácter resultante de poner en práctica costumbres y hábitos considerados buenos. Pero ambos conceptos se diferencian entre sí. (…) (https://www.aiteco.com/liderazgo-etico/ p.1) (recuperado 07/08/2019).
De acuerdo a las ideas de esta cita la educación moral por lo general(4). se aprende en los hogares y son el reflejo del modelo de los padres en su quehacer diario. El clima laboral también contribuye a que la ética se practique con mayor frecuencia, pero también ocurre lo contrario cuando los líderes de las organizaciones no son personas integras en el aspecto ético, también se convierten en personas contaminadoras de otros empleados y obreros para crear desborde, desconfianza y hasta quiebra de las unidades de negocio generando pérdidas para el Estado y aumentando el desempleo; así como la informalidad.
El liderazgo ético es una necesidad apremiante en los actuales momentos que atraviesa el país y otras repúblicas similares, puesto que de esto depende muchas veces que la gestión pública sea exitosa o tormentosa.
El liderazgo ético depende de principios, valores y creencias éticas. Este enfoque ético se desarrolla a lo largo de la vida .
Una persona con características de liderazgo ético ayuda a que la empresa cumpla con la responsabilidad social de ayudar a la comunidad además de tener la ventaja de aumentar la reputación organizacional y por ende mantener un buen clima laboral para que los niveles de rendimiento productivo aumenten de manera paulatina. Contrariamente cuando hay malas prácticas las empresas o instituciones como las personas comienza a conquistar una reputación y a ser percibidas como seres irresponsables, a esto se le conoce como el good well (buena imagen o buena reputación).
De esta forma, el liderazgo ético es un factor clave de éxito para toda organización empresarial, las Micro organización pequeña, mediana o gran empresa. La realidad, es que el interés por la ética de las empresas, organizaciones en general, y de sus líderes están en un claro aumento. Sobre estos últimos, su papel es clave al ser quienes contribuyen a establecer y fortalecer los valores de la organización y, por tanto, su clima ético.
El liderazgo ético tiene como ventajas que las empresas no solamente tengan una mejor percepción ante sus clientes sino también ante su propio personal que vendría a ser el público interno. Por ello, la productividad en una empresa manufacturado o de servicio va ir en beneficio ascendente puesto que el optimismo de los trabajadores impacta comprobadamente en una conquista de logros durante las cincuenta y dos semanas del año.
Según Adela Cortina, la ética profesional busca poner puentes y canales de comunicación entre los miembros de un centro laboral para que se trabajen con orden y entusiasmo además que las personas ayudan a tener una convivencia afectiva que va en beneficio a las metas de la empresa en favor de los intereses de los accionistas y la sociedad en general .
La posición de otros estudiosos de la ética como Schmidt Masterson, Eduardo sobre la ética profesional nos remontan a como el grupo humano que trabaja en una empresa y que no acepta conductas inmorales antiéticas tiende a tener mayor cohesión grupal y menores conflictos de intereses personales.
La capacitación ética entre los recursos humanos por lo general se puede medir en los resultados reales puesto que cada ejercicio financiero anual no solo representa números del activo y el pasivo de una empresa de gastos corrientes. Sino también la toma de decisiones acertadas y éticas de la dirección de la nave empresarial.
Por lo expuesto, la gravitancia del liderazgo ético es cada vez más preponderante. Los acontecimientos de corrupción y mentira que llevaron a la crisis financiera norteamericana y occidental del 2008 al 2009 conocida como la burbuja hipotecaria giro por muchos años en base al engaño que mandó a la pobreza a millones de personas no solo en los EE.UU de América sino también en Europa.
La debacle llevo al suicidio a muchas personas y los gestores de toda esta trama del mal en complicidad con empresas auditoras famosas en esa primera década del presente siglo son un claro testimonio de lo que se conoce por parte de un grupo de personas millonarias de cuidar sus intereses egoístas sin importar el daño financiero de la población de menores recursos económicos creando una situación conocida como la aporofobia(5).
El líder que acepta la responsabilidad de ejercer un liderazgo ético, conlleva a que el líder asume la responsabilidad de formar racional y emocionalmente a sus trabajadores. Esto es básico para ganarse la confianza, tranquilidad y colaboración de los mismos, que se verán identificados con los valores y objetivos de la organización y tratarán de desarrollar actitudes positivas ante el trabajo y la comunidad (Gomez 2009).
En las empresas no toda es felicidad, puesto que hay problemas exógenos las crisis están siempre al acecho en la turbulencia política y sociológica del país. El líder petico tiene que saber afrontar tales vicisitudes la demanda bien atendida es vital para que la empresa se mantenga a flote y se pueda pagar al personal en forma semanal o quincenal. Por eso los responsables tienen que ser un modelo de ejemplo ético también de experiencia para poder sortear los peligros por lo general externos aunque esto no es obstáculos para que haya también algunos problemas con el personal.
El líder ético tiene que tener un soporte de asesoría puesto que no lo sabe todo más aún cuando son temas de mercado. La clientela puede ser influenciada por otros competidores o sustitutos de productos que desean apropiarse de los clientes ajenos buscando cautivarlos de manera abierta o en forma sutil. Es por eso que este tipo de líder tiene que estar muy bien informado de lo que acontece alrededor de su empresa para evitar ser desplazado de las preferencias de sus clientes.
El líder ético no debe caer el el endiosamiento o la auto vanidad, tampoco quedarse obsoleto, cerrar las puertas a la comunicación con los subalternos de todo nivel, debe estar preocupado siempre de que haya un buen clima laboral y organizacional aunque esto no es fácil y hay formas de poder lograr mantener la sinergia del personal en las distintas áreas de trabajo de la estructura organizacional.
La gestión administrativa junto con la posición del enfoque de liderazgo ético se tiene que adaptar al modelo de gestión latinoamericano, americano escandinavo, japonés, chino, hindú entre otros.
Todo esto permite pues que los principios de la administración se cumplan a cabalidad y se hayan acondicionado a los nuevos tiempos del siglo XXI donde la tecnología cambia cada mes y va alterando las formas de competitividad de las empresas e instituciones.
En lo que concierne a otros autores sobre la definición de liderazgo ético tenemos a lo siguientes:
Contrariamente el estudio del liderazgo ético ha experimentado un auge a partir de la década de 1990 (Eubanks, Brown & Ybema, 2012). La razón de involucrar la ética en la investigación acerca de liderazgo va mucho más allá de la atención generada por los escándalos y detenciones carcelarias por corrupción en las organizaciones que se hicieron explosivas en los titulares de prensa gráfica y televisiva a partir de la década de 1970 (McCann & Holt, 2013; Steinbauer, Renn, Taylor & Njoroge, 2013). Esta conjunción liderazgo- ética se debe a razones como las planteadas por Brito (2016), quien sostiene que es necesario que los líderes, a través de sus decisiones y acciones éticas, se transforman en ejemplo de integridad para los grupos de interés de las organizaciones a las que pertenecen. Asimismo, en el clima actual de incertidumbre, existe el gran desafío de restaurar la confianza, la fe y el optimismo en las organizaciones (Niemeyer & Cavazotte, 2016). Por estas definiciones, los ciudadanos desean un liderazgo confiable, positivo y honesto, es decir, un liderazgo ético.
Por último, el liderazgo ético cada vez está teniendo mayor aceptación como parte del perfil competitivo de un gerente y así buscar que no solamente las habilidades duras como es la experiencia laboral y los conocimientos adquiridos con los años a nivel de estudios superiores y complementarios sean lo más predominantes, sino también que las habilidades blandas se usen a través del liderazgo y la relación de simpatía para que el personal lo siga a cumplir las metas en un clima de cordialidad y cohesión grupal cada vez más fuerte y éxitos.
Bibliografía
• Aristóteles (1980) Ética y Política Barcelona Ed. Bakker.
• Cortina A. (1990). Ética sin moral. Madrid: Tecnos
• Cotrina A. y Martínez E. (1996), Ética, Madrid, Akal.
• Gómez, E. (2000), El liderazgo ético: Un desafío de nuestro tiempo, Gestión 2000, Barcelona.
• Schmidt E. (1990). Ética y negocios para américa latina. Lima: Universidad del Pacífico.
• María J. (1975) Introducción a la filosofía. Madrid. Ed. Paidos.
• https://www.aiteco.com/liderazgo-etico. recuperado: 07/08/2019.
• https://www.eoi.es/blogs/mcalidadon/2015/03/30/importancia-del-liderazgo-etico/. Recuperado:06/08/2018